Dia 1 hacia mi destino

Plató y luces. Fama. Público y reconocimiento.

Solo tengo que recordar todo eso para aguantar en esta redacción de mala muerte.

Mis compañeras son... mis compañeras. Dejemoslo ahí.

Además a Nayade, esa pequeña niña repelente que ahora es adulta (pero sigue siendo repelente), ya la conocía. Su padre, un hombre poderoso con el que me codeaba. Y patrocinador de la cadena, lo que me hace atar cabos y saber el por qué ella está ahí. Además, me dijo que ella y su "papi" se rieron con mi chiste. Por fin alguien con humor.

A las otras ni las nombro. Total, para qué.

¡A por ellos!

Bien....

Hoy he hecho algunas entrevistas, pero a decir verdad, me quedo con la última que he hecho. Es para un programa de cotilleo o algo así. Se llamaba Dímelo o Díselo o algo así. Vale, nunca me ha gustado la prensa rosa y yo soy un presentador serio. Pero tengo que recuperar mi sitio cueste lo que cueste.

Aunque no me han ofrecido ser presentador, sino redactor, no me ha importado. Se que si lo hago bien en menos de un mes estaré presentando ese programucho, y de ahí, a recuperar el puesto que nunca debí perder, no me costará nada.

Además, los otros que había para ese puesto no me llegan a la suela del zapato. Había unas chicas rarísimas que no tenían la más mínima oportunidad.

Voy a quitarme mi traje y a darme mis cremas. Tengo que mantener este rostro bonito para cuando me hagan presentar.

El puesto es mío.

Desde 0

No importa. Lo bueno que tengo es que por mucho que me puteen, me levanto y sigo caminando. Y pienso recuperar el puesto que me merezco sea como sea. No creo que puedan odiarme toda la vida, y se que esa "broma" que todo el mundo convirtió en una montaña de arena se olvidará y volveré a tener mi sitio.

Al fin y al cabo, en la tele no hay tantos rostros guapos como el mío. Y lo sé.

Voy a buscar trabajo.